Historia del Municipio Guanta
Para nosotros la historia, es una de las formas de tener memoria, un recuerdo del pasado y de lo que ha pasado. Mediante escritos y anécdotas, podemos relatar acontecimientos que sucedieron en un lugar, es por eso, que en esta oportunidad llego el momento de conocer el pasado de Guanta.
Seguro que te apasiona tanto como a nosotros, conocer la historia de este hermoso municipio, su gente, sus costumbres y los acontecimientos más importantes que forman parte de nuestras raíces y nuestra identidad. eso y más encontraras a continuación.
Orígenes escritos de Guanta
Los primeros pobladores de Venezuela, no conocieron la escritura y su cultura se perdió en buena parte porque los españoles le inculcaron la suya, junto con nuevas creencias religiosas. Por eso olvidó sus vivencias y hasta la transmisión oral. Conocemos su pasado sólo por los documentos del Archivo General de Indias de Sevilla, los escritos de los cronistas de la época y los estudios arqueológicos recientes.
Y como en todo el país, esto sucedió en el Oriente, donde estuvo ubicado el indígena más asolado física y espiritualmente por la gesta civilizadora del europeo en Venezuela. Pues presenció fundaciones de villas y pueblos sobre lo que era su territorio, y perdió su autonomía por verse envuelto en una nueva relación cultural cuando se mezcló con nuevas razas.
Los primeros pobladores
Según los historiadores, las vecindades de Guanta, en el período que va desde 1500 a 1520, se crearon varias poblaciones, entre ellas la que existió en la isla de Cubagua (Nueva Cádiz a partir de 1528) como resultado de la explotación de las perlas, y Chichiribiche en el Golfo de Santa Fe por una misión de padres dominicos.
Ya, a partir de 1511, el territorio de Guanta había quedado bajo la jurisdicción de la Real Audiencia de Santo Domingo, junto con toda la costa venezolana de la Tierra Firme. Y luego forma parte de la Gobernación y Capitanía General de Venezuela cuando se crea ésta por Real Cédula del 27 de marzo de 1528.
En 1513 hubo intentos poblacionales en la serranía de Píritu que está cerca al mar. Y en las riberas del río Manzanares cerca de las costas, donde los padres Jesuitas se instalaron por primera vez en 1514. Todos estos lugares, de una u otra forma, marcaron su influencia en el devenir histórico de la población de Guanta.
Pero según los historiadores, Guanta no se fundó porque ya existía. El más conocido de los Cronistas de Indias, Fray Bartolomé de las Casas, habla de la Aldea de Maracapana (zona donde abundan árboles de maracas) para referirse a lo que posteriormente se conocería como Guanta.
En sus escritos habla de los indios Tagares y los ubica geográficamente al mismo territorio que hoy en día es nuestro municipio, acotada por la raza Cumanagota que vivía en lo que hoy constituye Barcelona, la raza Guaiquerí asentada al occidente en la zona de Mochima y la raza Core en las serranías de Bergantín y Turimiquire.
Los Tagares estaban diseminados desde los Valles de Guanta hasta los Altos de Santa Fe. Para ese tiempo la quebrada de Guanta era entonces un riachuelo de dos vertientes que regaba los valles para fecundarlo.
La época colonial
El proceso de colonización de las comunidades indígenas duró más de 500 años debido a la resistencia de las tribus en el territorio nacional. La colonización de la aldea de Maracapana era obligada para los españoles y portugueses, ya que era puerta de entrada marítima hacia el resto de las comunidades indígenas.
Esta fue la razón por la que implementaron tanto la religión como el trueque con los indios Tagares, a quienes ofrecían objetos, vestuarios y abalorios a cambio de perlas que eran sacadas del fondo del mar por los indios llamados Guatiaos, voz indígena que se relacionaba con el lanzarse al agua o estar dentro de ella.
Primer gobernante conocido de Guanta
La aldea de Macarapana pasó a ser de encomiendas, pues los indios cambiaban el producto de su siembra por abalorios. Para entonces hubo un cacique en Guanta, el primero que se conoce mediante relación escrita, llamado Gil González. Sus acciones se circunscriben al lustro de 1516 a 1521, año este último en que muere luchando por el honor de su raza, contra el sojuzgamiento al que se le pretendía someter. Para ese tiempo fue cuando existió la más grande conflagración indígena que se conozca de América y que tuvo su epicentro precisamente en Guanta.
Posteriormente, en la redacción que Lope de Las Varillas hace sobre la conquista y población de Nueva Córdoba en 1569, indica que el Cacique Guantar quiso ver a su gobernador, haciendo referencia al cacique de los Valles de Guantar (Valle de los Cangrejos) para esa época.
Después, cuando se funda el pueblo de Nuestra Señora Santa Isabel del Amparo de Pozuelos en el año de 1681, se dice que veinte familias indígenas de los Valles de Guantar junto con otras de Pertigalete, son las encargadas de mantener su poblamiento. Así Guanta comenzaba a ser relegada a ser el traspatio del territorio, el conuco, el sitio de la siembra solamente.
Guanta regresa a sus pobladores
El día 24 de mayo de 1783 a Guanta se le reconoce un territorio, cuando se le hace la mensura y se crean los Resguardos de la Comunidad de Indígenas de la Parroquia de Pozuelos por parte de su Señoría Don Luis de Chávez y Mendoza, del Consejo de su Majestad, su Alcalde del Crimen y Juez Comisionado de estas provincias.
Este señor precedió a la mensura, deslinde y amojonamiento de las tierras que correspondían a los naturales conforme a la resolución de la Ley Real de India, en ejecución de las facultades que para estas le son conferidas por su Majestad, hizo tocar el tambor de guerra para ajustar a la gente conforme a estilo y así congregados dio principio a la mensura desde el centro de la plaza del pueblo de Pozuelos.
Al hacer la repartición de los terrenos de Pozuelos se menciona varias veces a Guanta… hasta llegar al boquete en que da principio al Valle de Guanta… distante dos leguas de este mencionado pueblo, y en el que se hayan posesionados con abundantes sementeras de plátanos, cocos y cañas todos los indios de él y con cuyos frutos no sólo se socorren en la estación del verano, sino que proveen a las ciudades de Cumaná y Barcelona por tener puerto de mar muy buenos, manso y en buena disposición.
El 24 de mayo de 1783 se posesiona a los naturales habitantes del Valle de Guanta, como dueños verdaderos de estas tierras, por haberlas cultivado desde tiempo inmemorial. Y el 31 de octubre de 1807 se certifica en Cumaná la veracidad de los documentos registrados en este reparto.
El 4 de noviembre 1884 se admite una demanda de participación introducida por Antonio Tiamo, en representación de un grupo de la Comunidad de Indígenas. En documento de junio 1 de 1885 encontramos que “según los títulos se componen estos resguardos de dos porciones separadas: una en un propio pueblo, y otra en el Valle de Guanta, situado a dos leguas de aquel”, que según los mismos títulos contiene 15 fanegadas y 71 mil varas cuadradas que componen 368 hectáreas, 43 áreas.
La posterior reorganización territorial de Guanta está diseminada en documentos que avalan las ventas de las comunidades indígenas o sus descendientes a particulares, donde ceden sus derechos a terrófagos conformando la actual comunidad que hoy conocemos.
A comienzos de la época contemporánea, Guanta era un suburbio, un pequeño poblado de pocos habitantes. Es a partir del descubrimiento de las minas de carbón de Naricual, época de la fiebre del “Diamante Negro”, en el 1850, que se inicia la construcción del Puerto de Guanta, que numerosos extranjeros, llegaron con deseos de participar en la extracción, explotación y comercialización del mineral.
Época Contemporánea: Comienzo del desarrollo
El británico TOMAS SPENCER fue el primero en visualizar las potencialidades de la Bahía de Guanta, donde se construye el Puerto, que, junto con la Casa Aduana y el Ferrocarril, es inaugurado el 15 de febrero de 1892 y se convierte en factor importante de desarrollo del Estado Anzoátegui y del Oriente del país.
Primeros Barrios y caseríos de Guanta
A partir de la construcción del puerto, comienzan a conformase barrios y caseríos en sus alrededores, entre los que cuales se pueden mencionar el sector La Picha, considerado el barrio más viejo y cuyo nombre debe a un francés de apellido “Lepiche”, quien estableció un criadero de chivos, que se extendió a medida que fueron conformándose nuevas poblaciones.
Después se formaron los barrios El Pueblo y La Playa, donde llegaron a tener dos cines; El Tropical, frente la placita Sucre; y El Royal, cerca de la Iglesia Nuestra Señora de Los Desamparados. La Playa además se componía de las rancherías Boca e` Perro, por la oscuridad reinante; Fuera de Chisme, La Pajita y Volcadero.
Posteriormente nace Chorrerón, y debe su nombre a que el lugar, era una zona montañosa de árboles inmensos, donde las casas de barro, en época de invierno, eran devastadas por las fuertes precipitaciones semejantes al majestuoso Salto La Sirena, cuyas cascadas “Chorrerón Grande” y “Chorreróncito” crearon las pozas El Pargo, Rosa Montaña, El Embudo, Peñas Negras, entre otras que servían de disfrute a lugareños y visitantes, quienes en horas nocturnas se bañaban como Dios los trajo al mundo, y quienes a falta de jabón utilizaban la mata cundeamor.
Plagas y Enfermedades
Para combatir las plagas tales como chipos, zancudos y niguas la División de Mariología se encargaba de fumigar los contornos del Valle y casas con el producto químico DDT. Mientas a los habitantes se les proveía de una pastilla llamada Metoquina que contrarrestaba la fiebre palúdica que dejó la crecida de la quebrada, en 1927.
Transcurrido el tiempo, en el Valle de Los Parra, bajo el mandato de la Junta Revolucionaria de Gobierno, período 1945-1948, presidida por Rómulo Betancourt, la Jefatura de los Servicios Portuarios del Ministerio de Hacienda, contrató a los italianos Antonio Aletti y Felippo Sangrano para la ejecución de viviendas prefabricadas a las que pintaron de amarillo, color de la pastilla Metoquina, y adjudicaron a los damnificados, quienes más adelante, y en honor a la pastilla, bautizaron
El barrio La Metoquina debe su nombre a la pastilla que contrarrestaba la fiebre palúdica, que dejó la crecida de la quebrada, en 1927. Estas casas prefabricadas fueron pintadas de amarrillo igual al color de la pastilla Metoquina.
La primera empresa en Guanta
La primera industria que se conoció fue la de extracción de granza, arena y piedra caliza o de mármol. Entre los pioneros en esta labor se cuentan a los Hermanos Labastidas, quienes estaban dotados de una habilidad extraordinaria para arrancar y aflojar rocas y peñascos de la quebrada, cerros y paredones surtiendo a Guanta y Puerto La Cruz de material para construir viviendas, cunetas, brocales y aceras.
Esta labor desapareció con la instalación de la empresa Vencemos Pertigalete, moderna planta que junto al puerto impulsaban la mano de obra calificada de empleados y obreros en el municipio.
¿Como llego Guanta a ser Municipio?
Guanta, al igual que otras poblaciones venezolanas, estuvo sometida al dominio de los españoles, pero después de la independencia, fue hasta 1909 mediante la promulgación de la Constitución Nacional que es considerado municipio, pero el 06 de enero de 1944 se crea la figura de Distrito y queda constituido el Distrito Sotillo, con su capital Puerto La Cruz mientras Guanta, municipio foráneo, perdió su autonomía.
La Lucha por la Autonomía
Años de angustia y expectativas vivió un grupo de luchadores incansables de esta comunidad, que desde el año 1988 conformaron un comité Pro-autonomía de Guanta plateándose la necesidad de tener la potestad de elegir a sus autoridades, quienes pudieran tener la libre gestión de la materia que le compete y poder crear, recaudar e invertir sus propios ingresos.
En 1990 se constituyó una agrupación bajo la figura de Comité Promotor de Guanta como municipio autónomo en la sede de la Casa de la Cultura, y el 9 de julio del mismo año se juramentaron por la presidenta de la Junta Comunal.
Como puede suceder en toda lucha, cobra fuerza y se revitaliza definitivamente el 17 de octubre de 1990, se hace la respectiva solicitud por ante la Asamblea Legislativa del Estado Anzoátegui. En esa fecha, en sesión ordinaria, el diputado Víctor Gil hizo una exposición en referencia a los motivos que indujeron a la población de Guanta a solicitar la elevación de su parroquia a la categoría de Municipio.
La propuesta del diputado fue aprobada por unanimidad. Así, el 21 de junio del año 1991, el entonces gobernador Ovidio González puso ejecútese de ley y Guanta se convierte en municipio del estado Anzoátegui. Hoy en día, Guanta es municipio autónomo, porque cumple con todos los requisitos de la Ley Orgánica de Régimen Municipal.
Además de la historia de Guanta, vea También:
El ferrocarril de naricual
La casa de la aduana
Procesadora de Coco
Una de las Empresas más antiguas que existió en Guanta fue, Mariano Espino Sucesores, una planta procesadora de coco junto en el valle de guanta.